Cuando William estuvo recuperado de sus heridas, ya que ni siquiera su habilidad de hierro pudo soportar todo el daño de los ataques provocados por el shunko, les dio las gracias tanto a Kisuke Urahara como a Yoruichi Shihoin.
"Gracias por acogerme aquí cuando fui solamente un desconocido y por entrenarme para ser más competente en shunpo. En un futuro les devolveré el favor." dijo William al frente de la tienda, a los dos que le habían acogido y entrenado.
Con esas palabras, William decidió marcharse para completar la misión otorgada por el sistema, la cual es vencer a un capitán del Gotei 13. Para lograr eso, primero tendría que encontrar a un capitán, así que su primer objetivo no fue otro más que encontrar a Ichigo Kurosaki para encontrarse con el primer capitán al que se enfrenta en la historia original.
Desde el comienzo, William había decidido que evitaría la pelea contra cinco de los trece capitanes actuales. No lucharía contra Genryusai Shigekuni Yamamoto, Retsu Unohana, Sosuke Aizen, Soi Fon ni Kenpachi Zaraki.
No hacía falta explicar el porqué de esa elección. William sabía que cada uno de esos capitanes podría hacerlo picadillo si luchasen seriamente. Entre esos capitanes, probablemente a la que más temía ahora era a Soi Fon por tener un shunpo similar a Yoruichi y un shikai que podría matar a cualquiera con dos golpes certeros.
Kisuke miró de reojo a Yoruichi, la cual no apartó la mirada de William, quien se iba alejando. Al ver aquello, Kisuke solo pudo sonreír. Estaba feliz porque su compañera en quien confiaría su propia vida hubiera encontrado algo más que aquella solitaria vida de criminales fugitivos.
"Voy a pasar un tiempo con el grupo de Shinji, creo que estoy apunto de descubrir algo importante sobre los Visored. Mientras tanto, ¿Podrías vigilar a ese pequeño que está a punto de meterse en problemas? Realmente tiene pensado enfrentarse a un capitán." dijo Kisuke con el abanico desplegado frente a su rostro y su mirada fue seria. "Y ya están aquí."
Había veces que Yoruichi no estaba a gusto cuando Kisuke era demasiado perceptivo sobre ella, pero esta vez agradeció en lo profundo de su ser a Kisuke y se transformó en un gato negro para seguirlo desde la distancia.
Lo que Yoruichi no sabía era que Kisuke se sentía culpable por arrastrarla a su problema cuando él fue incriminado por Aizen hacía más de cien años. Ella abandonó su posición, estatus y a los demás con los que tenía alguna relación por él, un compañero con el que había luchado a su lado y estaba siendo incriminado injustamente. Kisuke no podría vivir con la culpa si además de todo eso le arrebatase la posibilidad de encontrar el amor. Si le había llegado su momento a Yoruichi, no quería ser el lastre que la detuviese.
"Pero en serio, ¿Cuándo me caerá una mujer hermosa y misteriosa de la nada?" se preguntó Kisuke con un poco de envidia, aunque tenía un poco de preocupación al sentir un poderoso reiatsu en la ciudad de Karakura
William llegó al universo de Bleach justo al principio de la historia, al igual que ocurrió cuando reencarnó en Attack on titan, pero debido a que pasó un tiempo entrenando, las cosas ya habían avanzado.
Mientras vagaba por Karakura buscando el hogar-clínica de la familia Kurosaki, se hizo de noche. Aunque William tuvo su primera vida como humano en el mundo moderno, no esperaba que luego de cinco años viviendo a las afueras de una ciudad rural perdiera el sentido de la orientación tan rápidamente.
"¿Me he convertido en un pueblerino que no sabe moverse por la ciudad?" pensó William un poco dolido por eso.
Fue en ese momento donde su estado de ánimo bajó, que vio a una persona corriendo con una bolsa de plástico en su mano. Aquella persona pasó por delante suya sin siquiera darle una mirada, pero William supo exactamente quien era.
Uryu Ishida, también conocido como el último Quincy vivo y uno de los amigos cercanos de Ichigo Kurosaki.
William vio lo apurado que se encontraba, pero también se fijó en las vendas que tenía por sus brazos. Juntando todas las pistas, William dedujo el punto de la trama en la que se encontraba.
"¿No es una noche como esta cuando Rukia es llevada a la sociedad de almas para ser ejecutada? ¡Y quien se la lleva no es ni más ni menos que el capitán Byakuya!" pensó William con una sonrisa en su rostro.
Si se paraba a pensar, era realmente afortunado no haberse perdido este evento de la trama. Aunque se perdió varios otros como el Menos Grande apareciendo en Karakura, pero no es lo mismo. Sería difícil poder encontrarse con un capitán aislado de la sociedad de almas y que además no fueran esos cinco con los que no quería luchar.
"Pero menudos bastardos suertudos son los de este universo. Ishida Uryu debería tener quince años como yo pero me saca media cabeza. ¿¡Porqué con quince años son tan altos como un maldito adulto!?" se quejó William en su mente mientras lo seguía desde las sombras.
William observó cómo Ishida hizo su aparición frente a Rukia, Renji y Byakuya, claramente mintiendo sobre lo de haber ido a una tienda y estar regresando a casa después de comprar. Pero no tardó mucho antes de terminar tendido en el suelo, derrotado por Renji.
Claramente, un arquero no podría derrotar a un guerrero a corta distancia. Al menos no el Uryu Ishida del comienzo de la historia.
Fue algo verdaderamente lamentable de ver. Pero antes de que Renji diera el golpe final, apareció Ichigo Kurosaki en su forma de shinigami para detenerlo.
Los eventos siguieron idénticos a la historia original, al principio Ichigo perdía terreno contra Renji, pero después de que liberó su reiatsu de forma inconsciente comenzó a tomar la delantera. Todo fue muy rápido, hasta que en uno de esos ataques, Byakuya decidió actuar.
La zanpakuto de Ichigo perdió gran parte de su hoja cuando fue a atacar a Renji, al observar vio a Byakuya a la distancia con el trozo faltante en una de sus manos. Aquel pedazo de hoja cayó al suelo e Ichigo se puso en guardia viendo que Byakuya llevó su mano a la empuñadura en su cintura.
Byakuya usó shunpo para acercarse y atacar, pero cuando fue a desenvainar para apuñalar su pecho sintió una mano que detuvo su brazo de sacar la espada.
Cuando todos pudieron volver a ver, Byakuya estaba frente a Ichigo. Se había movido en un instante y nadie pudo reaccionar a su velocidad, pero a su lado había un adolescente de quince años agarrando la muñeca de Byakuya.
La mirada de Byakuya sobre William fue de sorpresa y asombro, porque aunque había sentido su reiatsu en las sombras, ya que William no sabía esconderlo, no esperó que pudiera aparecer a su lado tan rápidamente y pensó que solo había venido a observar.
"¿Qué crees que estás haciendo? ¿Acaso no estás perdiendo la cara de los capitanes al atacar a un novato sin apenas experiencia?" dijo William con una mirada claramente desafiante.
Byakuya era uno de sus personajes favoritos antes de su reencarnación. Tenía un temperamento tranquilo, noble y además fuerte, pero esos pensamientos que tenía sobre él se esfumaron tras su reencarnación. No podía soportar a una persona que pudiera mandar a ejecutar a su propia hermana sin un cambio de expresión.
Al imaginar que algo similar pudiera pasarle a Mikasa, sabía que haría todo lo posible para salvarla, por eso a ojos de William, Byakuya había perdido todo el respeto que le había tenido.
"¿Crees que tu intromisión es un acto honorable?" preguntó Byakuya sin levantar el tono. "Si piensas que puedes juzgar mis decisiones sin comprender el peso del deber... eres aún más ignorante de lo que pareces."
William apretó con más fuerza la muñeca de Byakuya, sin romper el contacto visual. El reiatsu entre ambos se tensó, haciendo que incluso Renji diera un paso atrás por instinto. Ichigo tuvo que tomar algo de distancia o sentía que su cuerpo podría desgarrarse.
"¿Llamas 'deber' a ejecutar a tu propia hermana? No me interesa lo que el Gotei 13 o la central 46 considere justicia. Si tú no eres capaz de proteger a los que te importan... ¿para qué sirve tu poder?"
Por un momento, el silencio se volvió absoluto. Ni Ichigo ni Rukia se atrevieron a interrumpir. Incluso el viento pareció haberse detenido.
La mirada de Byakuya se volvió un grado más severa, casi como una cuchilla afilada desenvainándose lentamente.
"Tienes demasiadas palabras para alguien que no conoce la historia ni la ley. No eres más que otro arrogante con ilusiones de fuerza." respondió Byakuya.
Con un súbito movimiento, Byakuya desapareció de su lugar al mismo tiempo que liberó su muñeca del agarre. Byakuya desenvainó la espada y apuñaló a William por la espalda. Un instante después, la punta de su zanpakuto emergió del pecho de William.
Ichigo abrió los ojos con incredulidad. No había visto nada. Ni silueta. Ni un solo movimiento. Solo el antes y el después.
Pero entonces, justo cuando el filo se hundía más, la figura atravesada desapareció.
"Hablas de ilusiones, ¿pero no eres tú quien las persigue?" dijo William arrogantemente desde detrás de Byakuya.
"Imposible." dijo Byakuya consternado, viendo como a quien creía haber atacado era solo una imagen residual.
William nuevamente usó Shunpo para colocarse a diez metros frente a Byakuya.
"En tan solo unos cuantos días he llegado ha este nivel de shunpo. Todo se lo debo a mi maestra, quien tiene el título de la diosa del destello." dijo William con una sonrisa que parecía más provocación que orgullo. "Ah, espera, recuerdo que mi maestra también fue tu maestra hace más de cien años. ¿Porqué solamente tienes esta velocidad mediocre? ¿El líder del clan Kuchiki de verdad puede ser tan lento?" se burló William con todo lo que podía.
William podía decir eso porque estaba comparando la velocidad de Byakuya con Yoruichi. Incluso si Yoruichi en la actualidad tenía sus habilidades oxidadas, todavía superaba con creces a Byakuya. Después de todo, a diferencia de otros capitanes, Yoruichi llegó a ser la capitana de la segunda división sin usar su zanpakuto. Sus habilidades en shunpo y kido superaban las de otros capitanes.
Byakuya no respondió a la burla. En su lugar, su reiatsu se elevó con una elegancia cortante. En un instante, Byakuya desapareció.
El shunpo fue perfecto. Letal.
Pero William lo esperaba.
Con reflejos afinados tras días de entrenamientos brutales con Yoruichi, William giró en el momento exacto y detuvo el tajo descendiente de Byakuya con su zanpakuto, la cual chirrió con violencia al cruzar ataques. El impacto generó una onda de choque que levantó polvo a su alrededor. Ambos espadachines se miraron brevemente a los ojos.
William sonrió.
Pero no duró mucho.
Byakuya redobló el ataque con una velocidad fulminante. Su dominio de la espada superaba al de William con creces. En apenas unos segundos, los filos chocaban una y otra vez, cada golpe más preciso que el anterior.
William retrocedía, conteniendo la tormenta con dificultad. Se hizo muy evidente, su zanjutsu aún no estaba a la altura de un capitán.
En uno de esos intercambios, la guardia de William cayó apenas por un instante, y la hoja afilada de Byakuya se coló con un tajo lateral dirigido a su abdomen.
Sin pensarlo, William extendió su mano y agarró la hoja de Byakuya con la palma desnuda.
¡CLANK!
El filo se detuvo en seco, atrapado por su mano.
No hubo sangre, ni marca de corte.
Byakuya abrió los ojos. Renji tragó saliva. Ichigo ni siquiera entendía lo que estaba viendo. Rukia no pudo creer lo que veía.
William sostuvo el filo firmemente con una sola mano.
Esta vez fue el turno de William para aprovecharse del descuido. Como estaban tan cerca el uno del otro, no podía balancear bien su espada y aunque lo hiciera no causaría una gran herida, así que la lanzó al aire para liberar su mano y usó una técnica de hakuda.
"Ikkotsu" murmuró William mientras ponía toda su fuerza para maximizar el poder de esa técnica de combate cuerpo a cuerpo.
¡BOOM!
Byakuya fue lanzado como un muñeco de trapo por toda la avenida mientras iba destruyendo todo el suelo a su paso. William supo que era el ikkotsu más fuerte que había mostrado hasta la fecha, y todo se debía a su entrenamiento con Yoruichi que tenía beneficios adicionales, después de todo le hizo más fuerte físicamente.
Al extender la mano hacia arriba, su zanpakutó aterrizó firmemente en su mano y la apoyó sobre su hombro.
"Admitiré que eres mejor que yo en Zanjutsu." declaró William un poco molesto por ser inferior en Zanjutsu, pero ya tendría tiempo más tarde para aprenderlo o ganarlo del sistema.
Byakuya se levantó lentamente entre los escombros, el polvo aún flotando en el aire a su alrededor. Su haori estaba desgarrado en un costado, y aunque no sangraba visiblemente, el golpe que había recibido no era algo que pudiera tomarse a la ligera.
La batalla contra un capitán estaba a punto de comenzar de verdad.